Aula 47

Cierto día se reunieron los sakabalawa para admirar la belleza que había en la Tierra se subieron a los arboles, a la montaña, pasearon por el mar, por la laguna ,y observaron con emoción las obras de dios . Por un momento disfrutaron del apacible soplar del viento que subía y bajaba con ritmo sereno. También observaron con emoción como las ribera de los ríos presentaban extensos cañaverales y platanales que acariciaban continuamente a la madre tierra . El silencio de la noche interrumpido por los truenos y relámpagos que celebraban su luz en el universo . La madre tierra renovaban sus vestimenta con flores que  aromatizaba el ambiente.

Los sakabalawa dijeron:

Hay tanta belleza a nuestro alrededor, arriba y abajo , ¡que  bella nuestra casa la tierra, donde hace miles de año dios  transformó  a sulara en todo su esplendor !

¡Cuántas flores! ¡que linda catarata   que linda montaña , que nubarrones , que celaje el del atardecer  y que rayos los detiene ¡Miren allá el fondo del universo !  ¡Que linda noche ! decía una y otra vez sakabalawa . ¿Qué son aquellas luces? , parecen las flores de los arboles de corteza amarrilla colgadas allá en el universo . Su luz brilla sin cesar .Unos sakabalawa , dijeron  que era las estrellas ,otros comentaron que dios había dicho que se llamaban “las   cabritas ” ,y que no eran ramos de flores . Un sakabla dijo: yo quiero un pedacito .

  De inmediato , otros sakabalawa dijeron que ellos también , y así discutieron por varios días . Algunos empezaron a soplar muy fuerte para que se cayeran las flores de las “siete cabritas” ,sin embargo las estrellas nunca se  desprendieron del cielo. 

 Finalmente ,se cansaron de discutir un día se reunieron y dedicaron a hacer los siguiente – vamos a construir  una  enorme escalera  desde la  tierra hasta las “ las  siete cabritas   ” allá  en el universo sembraron un poste donde  se congela el mar  hacia el sur   y el otro hacia norte.

El ultimo poste lo sembraron en el centro de la tierra. Luego empezaron a construir poco a poco la escalera cruzaron los nubarrones y pronto llegaron a la mitad del universo .                 

A Dios no le gusto la idea de los sakabalawa , entonces pensó .

Ojala se quiebre el poste que esta donde nace el Sr sol.

De inmediato los sakabalawa cayeron en el suelo murieron al chocar con las rocas .Pero pronto se reunieron nuevos sakabalawa y empezaron a construir otra gran escalera .

Dios malhumorado quebró el nuevo poste; al instante cayeron los sakabalawa y murieron, algunos se convirtieron en todo clase de  animales: tanto como animales terrestres como acuatico.

Los sakabalawa lo intentaron tres veces y Dios nos les permitió llegar pero la cuarta vez que construyeron la escalera hasta llegar al fondo del universo .Duraron varios años en construir la gran escalera, por fin alcanzaron la casa de Dios , precisamente donde colgaba las “siete cabritas” . Al asomarse vieron que no eran estrellas, ni flores , si no una gran serpiente que se movía y exhibía muchos colores.

-¡Es una serpiente lo que iluminaba el universo ! – dijeron todos.

Los sakabalawa  vieron en la casa de dios a muchas gente divirtiéndose, cantaban , coreaban y brincaban .

Los jaknamas del universo quedaron admirados por la presencia de los visitantes , los sakaba y en el coro invitaron a los hermanitos de la tierra a pasar adelante .

¡Tomen asiento hermanos sakabalawa ! –Los jaknamas danzaban el bulsique y el cantor de la danza los invito a bailar .

-¡vengan a danzar  con nosotros ! Aquí les tenemos mucha comida, hay carne fresca  preparadas de  diferentes formas de carne asada, carne ahumada con buen hueso, buen lomo y muchas cosas más. Vengan a disfrutar de lo que tenemos.

Los invitamos Sakabalawa y los jaknama se juntaron para danzar el bulusike.

El cantor jaknama empezó a dirigir la danza allá en el universo, pronto se escucharon los mensajes del canto que decían

Hermanos sabio, jefe del grupo de los sakabalawa de la Tierra yo, como jefe cantar de los jaknama y sabia aquí en el universo les solicito humildemente ir a traer un hermoso cacao con mi hermano. Además quiero agradecerles por venir a compartir estas ofrendas con nosotros.

 Los invitados escucharon que mediante la danza del búlusike les están pidiendo un hermano para acompañar a  jakná a cosechar cacao allá en el universo.

Uno de los jáknama entonces aun invitado que fueron a traer cacao. El hermano sakabalawa acompaño a los moradores del universo a traer cacao, pero el cacao era el invitado mismo.

En poco tiempo trajo el cacao en la mano y dijo:

Que hermoso y sabroso está el cacao ¡Muchas gracias al señor jefe de nuestros invitados!

 En ese instante se destruyó un integrante de los invitados

La danza del bulusike y pronto se escucho otro mensaje. Esta vez mediante e canto, el señor jefe de los moradores del universo pidió la carne de una danta.

El jefe de los sakabawa aprobó la solicitud. Entonces se llevaron a otro integrante de los visitantes de la Tierra a caza una danta en los bosques. A su regreso, el jaknama traía carne ahumada de danta, esa carne era la carne de otro hermano no la carne de danta como se había mencionado.

De esta forma los moradores del universo fueron acabando con todos los integrantes de los sakabalawa. Al final de la ceremonia quedaba solo el cantor sakabalawa, quien dijo que iría a orinar y a defecar para continuar con la fiesta.

De inmediato apareció la señora abuela luna, quien le dijo:

Hijo mío, usted está solo y en peligro aquí en el universo. Los jaknama se han bebido y comido a todos sus hermanos, los mataron y entre ustedes mismos les ayudaron a comérselos. Ellos transformaron  a cada uno en diferentes formas de frutas y de carne. No era carne para comer, eran frutas para deleitarse, sino carne y frutas de la sangre de sus hermanos. Váyase cuanto antes, y trate de esconderse debajo de mi enagua, no vea hacia arriba, no hable, ni respire fuerte, no llore, ni sonría.

Al instante se escuchaban los hombres  y las mujeres jaknama del universo.

Todavía huele al aroma del cacao, todavía queda un visitante de algún rincón de nuestra casa.

Busquémoslo.

Los jakmana llegaron donde estaba la abuela luna y le comentaron:

Abuela luna porque aquí se desprende un aroma exquisito de cacao.

La abuela luna contestó:

No señores, aquí no hay nada. El aroma que ustedes sienten es el mismo cacao que ustedes cosecharon en su fiesta allá en la casa, por favor no molesten, aquí no hay nada.

Debajo de la enagua de la abuela luna yacía temblorosa el cantor sakabalawa, el jefe de los invitados de la tierra.

 Los hombres del universo insistieron varias veces y aun así  la abuela luna lo negó  y escondió el cantór.

Cuando se fueron los jaknama, la abuela luna le dijo al cantor de la Tierra.

Tome este tronco de árbol con fuego y cierre los ojos, no vean nada por varias horas y tratemos de caminar hacia adelante. Cuando llegue a su hogar no comente nada de lo sucedió. Con su familia durante un año.

Sin embargo el cantor de la tierra desobedeció a la abuela   luna. Cuando regreso a casa narró inmediatamente lo ocurrió a todos los presentes.

Después de la historia, el señor sakabawa se enfermó por la noche se acostó y al amanecer no apareció, su cama quedó mojada con chocolate. Solo le dejó un mensaje a una niña quien más tarde se transformó en el marido de la luna.

 

Relato recopilado por María José Sanchez